¿Qué es la Ley General de Discapacidad?

Las personas con discapacidad conforman un grupo que durante muchos años ha sufrido condiciones de exclusión. Esto ha restringido sus derechos básicos y obstaculizado o condicionado su desarrollo personal. Tal es el ejemplo de conseguir empleo y percibir un sueldo digno.

Quizá te pueda interesar: El primer paso hacia la diversidad es el camino hacia el impacto social.

Es por esto que los legisladores se han dado la tarea de recoger las necesidades detectadas de las personas con capacidades limitadas y han propuesto soluciones por medio de medidas que promueven la igualdad de oportunidades. El objetivo de estas medidas es eliminar los inconvenientes que sufren las personas con discapacidad y que anhelan una vida plena y una realización personal. Estas medidas buscan que las personas con discapacidad tengan una vida de iguales condiciones que el resto de los ciudadanos.

La Ley General de la Discapacidad (LGD) fue aprobada por el Real Decreto Legislativo el 29 de noviembre del 2013 e integra en una sola ley las siguientes normativas:

-La antigua LISMI: creada el 7 de abril de 1982, la cual busca la integración social de las personas con capacidades diferentes.

-La LIONDAU: creada el 2 de diciembre del 2003, la cuál persigue la igualdad de oportunidades, la no discriminación y la accesibilidad universal de las personas con discapacidad.

-La Ley de Infracciones y Sanciones: creada el 26 de diciembre de 2007 y la cual establece una serie de infracciones y sanciones que buscan proteger la igualdad de oportunidades, la no discriminación y la accesibilidad universal de las personas con discapacidad.

La LGD engloba las medidas descritas anteriormente y establece que las empresas públicas y privadas que emplean a más de 50 trabajadores tienen la obligación legal de incorporar un mínimo (no inferior al 2%) de trabajadores con discapacidad.

Conoce los beneficios de incorporar la diversidad a tu empresa.

¿Qué es el Certificado de Excepcionalidad?

Las empresas que, por razones organizativas, productivas o económicas, no pueden cumplir con la LDG, pueden solicitar un certificado de excepcionalidad. Este certificado se adapta a las Medidas Alternativas, las cuales proveen a las empresas de otras opciones para cumplir con la ley si no pueden realizar la contratación de personas con capacidades diferentes directamente. Estas Medidas Alternativas están reguladas por el Real Decreto 364/2005, de 8 de abril y se desglosan de la siguiente manera:

1. La celebración de un contrato mercantil o civil con un centro especial de empleo o con un trabajador autónomo con discapacidad que permita el suministro de bienes necesarios para el desarrollo de la actividad normal de la empresa.
2. La celebración de un contrato mercantil o civil con un centro especial de empleo o con un trabajador autónomo con discapacidad. Este contrato debe buscar la prestación de servicios ajenos a la actividad normal de la empresa.
3. La realización de donaciones y de patrocinios de manera monetaria que busquen la inserción laboral y la empleabilidad de personas con capacidades diferentes.
4. La constitución de un enclave laboral, previa suscripción del correspondiente contrato con un centro especial de empleo.

Cabe recalcar que la Ley General de Discapacidad afecta la empleabilidad de las empresas, ya que fomenta la formación profesional y la integración de personas con capacidades diferentes al mercado de trabajo por medio de la inclusión y la inserción laboral. Promoviendo una sociedad más consiente y más activa de los derechos y libertades básicas de todos los ciudadanos.